Alimentación saludable y su relación con el aprendizaje
Por: Dra. María Eugenia Romay Castillo
Nutrición para niños en edad preescolar
Es común escuchar durante las comidas familiares a las madres diciendo: “come todo lo que hay en tu plato para que te pongas grande y fuerte!” o bien, “¡tienes que comer frutas y verduras para ser muy guapo o hermosa!”, y nada más cierto que esto, aun cuando no recuerdes las clases de biología en la secundaria o la pirámide alimenticia de la primaria, es por todos sabido que los alimentos ingeridos tiene un objetivo en el cuerpo humano a cualquier edad.
Sin embargo, durante la edad preescolar (entre los 3 y 6 años), la alimentación es fundamental; los niños se encuentran en la etapa de desarrollo psicomotor más importante, así como cognitiva. Demandan una gran cantidad de energía para realizar sus actividades en el jardín de niños, en donde deberán desarrollar la coordinación entre sus ojos y manos, o entre sus piernas y ojos, para ello es necesario ingerir cantidades adecuadas de carbohidratos que habrán de convertirse en energía dentro de las células, pero… no en exceso ya que se puede transformar en grasa y kilos de más.
Por otra parte, el cerebro de un niño demanda energía en forma de azúcar que le permita establecer conexiones sinápticas con cada lección impartida en el aula, sin mencionar que, durante esta etapa de la vida, el cerebro de un niño tiene mayor plasticidad que en otras. Las principales fuentes de glucosa son los carbohidratos como cereales, frutas, lácteos, además el cerebro requiere de vitaminas, minerales, ácidos grasos y proteínas.
De acuerdo a la UNICEF (2019) A nivel mundial, al menos uno de cada tres niños menores de cinco años no crece de manera adecuada porque sufre una o más de las tres formas más visibles de malnutrición: retraso en el crecimiento, emaciación y sobrepeso, por eso es importante que los padres de familia o cuidadores tengan la información correcta de como alimentar a los niños.
Consejos para una buena alimentación
Nada más difícil que lograr que los niños en edad preescolar consuman todos los grupos de alimentos durante el día, aunado a esto se encuentra la falta de conocimiento sobre la correcta combinación de ellos o los requerimientos calóricos que el infante necesita.
La dinámica familiar, la adaptabilidad y cohesión entre los que la forman, tiene influencia en los hábitos alimenticios de los niños, así mismo los amigos y los medios de comunicación, sobre todo la televisión que presenta una serie de alimentos chatarra, que prefieren por encima de la comida saludable.
Alcaraz (2000) citado por Méndez Moralez (2013) los siguientes son algunos consejos útiles a la hora de la comida de los niños en edad escolar:
Siempre se debe ofrecer un desayuno que contenga: fruta, leche, cereales (pero no azucarados), un sándwich de mantequilla de cacahuate o con alguna proteína como el pollo o huevo (sin la yema).
Enviar al niño una colación para media mañana, la cual deberá contener: fruta, vegetales, yogurt, queso, galletas saladas, un emparedado con proteína en caso de no haber tomado ya uno por la mañana y suficiente agua natural o de sabor con poca azúcar.
Es importante señalar que jamás un niño de edad preescolar debe acudir al jardín sin haber desayunado, esta es una de las comidas más importantes del día, ya que vienen de un ayuno de más de 8 horas (tiempo en que deben estar durmiendo) y que el cerebro es incapaz de procesar información recibida de manera óptima.
De igual forma, se debe crear un menú para todos los días de la semana, es recomendable sentarse con el niño para mostrarle la variedad de alimentos que puede y debe ingerir, creando una combinación saludable y equilibrada.
Se recomienda lo siguiente: Energía: 1.800 kcal/día (90 kcal/kg peso/ día). • Proteínas: 1,1 g/kg peso/día (OMS, RDA), (65% de origen animal). • Calcio: 800 MG/día (RDI) (Peña Quintana, 2010).
¿Cómo fomentar hábitos de alimentación saludable para niños?
La mejor manera de enseñar a un niño los buenos hábitos alimenticios es poner el ejemplo en casa; la persona encargada de preparar los alimentos deberá tener el conocimiento de las cantidades adecuadas para ellos y, además, lo más importante, presentar el platillo de una forma atractiva y divertida.
Los niños son un reflejo de los padres en muchos aspectos, de ahí la necesidad de que también los padres tengan una buena alimentación y sean capaces de ofrecer a sus hijos alimentos sanos, nutritivos y adecuados desde que tienen la edad para deglutir, esto no quiere decir que los privaran de alguna golosina o pastelito, hay alternativas saludables para todos ellos.
Por último, es importante resaltar que debe existir tanto en el seno familiar como en la escuela una buena educación para la salud y esta incluye la alimentación y la práctica de un deporte.
Referencias bibliográficas
Morales, M. M. (2013). La influencia de la nutrición en el aprendizaje de los niños de primer grado de primaria (Doctoral dissertation, 42).
Peña Quintana, L., Ros Mar, L., González Santana, D., y Rial González, R. (2010). Alimentación del preescolar y escolar.
Unicef. (2019). Estado Mundial de la Infancia 2019: Niños, alimentos y nutrición. Crecer bien en un mundo en transformación. Recuperado de: https://www. unicef. org/media/61091/file/Estado-mundial-infancia-2019-resumen-ejecutivo. pdf. Fecha de consulta, 21.